Galicia sorprende muy gratamente, hoy visitamos el Monasterio de Poio, enclavado en el municipio homónimo.
Los primero vestigios de la existencia de este Monasterio quedan constatados en un documento que hace referencia a él, fechado en el año 942. Su fundación se asigna a San Frustuoso.
La orden de los Benedictinos moraron en el Monasterio, permanecieron en él hasta el año 1835, con ellos el Monasterio adquirió su máximo esplendor. En ese año y como consecuencia de la ley de desamortización de Mendizabal, los Benedictinos lo abandonaron. Sufre entonces un periodo de deterioro y abandono. En 1890 es ocupado de nuevo. Los Mercedarios recuperan y rehabilitan el Monasterio dándole el esplendor arquitectónico actual.
Hoy día, el Monasterio de Poio está declarado Monumento Histórico Artístico por su arquitectura de incomparable belleza.
Adentrarse en su interior permite descubrir verdaderas maravillas, mención especial merece el Retablo de estilo churrigueresco, el Claustro de las Procesiones, cerrado por 24 arcos de medio punto, con un precioso jardín en el centro adornado con una cantarina fuente.
Parte del Mosaico |
En el Claustro del Crucero encontramos un monumental mosaico en el cual se reproduce el recorrido del camino de Santiago mediante la reproducción de variadas escenas tradicionales de momentos Históricos, así como de los acontecimientos más importantes acaecidos en los distintos lugares por los cuales transcurre el camino.
Parte del Mosaico del Claustro del Crucero |
En los jardines adyacentes al Monasterio encontramos un horreo , considerado uno de los de mayor longitud de Galicia.
Horreo del Monasterio |
Descubre Galicia y difrútala, merece la pena.
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