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LA ISLA DE LOS MUSEOS - BERLÍN


   La Isla de los Museos se encuentra en el corazón de Berlín, sobre una isla en el río Spree.
Isla de los Museos (desde la Catedral)
   En 1840, Federico Guillermo IV de Prusia ideó el maravilloso proyecto de convertir la isla sobre el Spree en un santuario del arte y la ciencia. Cautivado por la arquitectura griega pretendió crear una Atenas en Prusia, por ello el diseño de los museos se inspiró en la Acrópolis de Atenas. En un principio se construyó el Museo Antiguo al cual el rey trasladó sus colecciones de arte, después se agregó el Museo Nuevo y posteriormente la Galería Nacional, componiendo un tríptico de la arquitectura clasicista. En 1871 tras la fundación del Reich la Isla se convirtió en símbolo de orgullo nacional. Los últimos museos construidos en la isla fueron el Mueso Bode y el Museo de Pérgamo.


Durante la Segunda Guerra Mundial, los bombardeos sobre Berlín destruyeron la ciudad, la Isla de los Museos, situada en el corazón de la ciudad, quedo igualmente arrasada y convertida en un páramo de escombros y así permaneció durante mucho tiempo, hasta que por fin, tras la caída del Muro, el Patrimonio Cultural Prusiano inicia la reconstrucción. En 1999 la UNESCO incluye la Isla de los Museos en la lista del Patrimonio Mundial.

   La Isla de los Museos es uno de los complejos museísticos de arte y arqueología más prestigiosos del mundo, se trata de un espacio singular por la concentración de museos, en menos de un kilómetro cuadrado se concentran más de 6000 años de historia de la humanidad repartidos entre sus cinco museos: el Museo Antiguo, el Museo Nuevo, la Galeria Nacional, el Museo Bode y el Museo de Pérgamo, todos ellos de reconocida fama internacional debido a las magníficas colecciones de arte que albergan en su interior.

Museo Antiguo



EL MUSEO ANTIGUO - Es la obra más significativa del clasicismo, en su interior se expone arte y esculturas de la Antigüedad  de Grecia y Roma. Numerosas esculturas de piedra y bronce, frisos, jarrones, oro y joyas de la antigua Grecia.



EL MUSEO NUEVO - Destruido completamente durante la guerra, en 1999 comenzó su reconstrucción, prolongándose durante 10 años, se abrió en 2009. Las salas del Museo Nuevo acogen una ingente colección de arte, que se divide en tres espacios propios, el Museo Egipcio, con su obra maestra NEFERTITI, , el Mueso de la Prehistoria y el Museo de la Protohistoria













Antigua Galería Nacional
ANTIGUA GALERÍA NACIONAL - Edificio inspirado en la Acrópolis de Atenas, realzado por una majestuosa escalera, Se abrió al público en 2001, siendo el primer edificio reabierto en la isla tras la reunificación de Alemania. La arquitectura clasicista armoniza con la exposición de obras de arte del Clasicismo que encontramos en su interior, además de magnificas colecciones del Romanticismo y el Impresionismo.
 




MUSEO BODE - El museo Bode alberga una importante colección de esculturas y una exposiciòn inigualable de arte bizantino, destaca, también, el gabinete numismático en el que se exhiben monedas de la Grecia Antigua y del Imperio Romano, monedas islámicas y de la Edad Media Europea.


Vía Procesional
MUSEO DE PÉRGAMO - Es el único museo del mundo que su construcción es posterior a la exposición de las obras de arte. su diseño fue funcional: guarecer las obras de arte de las inclemencias del tiempo.
La imponente construcción envuelve las mas valiosas joyas antiguas, en los inmensos salones encontramos una impresionante colección de antigüedades clásicas, conjuntos arquitectónicos arqueológicos, entre los que destacan la Via Ceremonial de 30 metros de longitud, decorada con ladrillos barnizados de azul, que lleva a la Puerta de Isthar, la legendaria Babilonia de Nabucodonosor; la puerta del mercado de Mileto de 16 metros de altura, el altar de Zeus de Pérgamo decorado con un enorme friso y unas columnas jónicas de 13 metros de altura.


Zócalo Vía Procesional
Puerta de Isthar

Mercado de Mileto
Columnas jónicas








Altar de Zeus. Pérgamo


LAS CINCO VILLAS - Zaragoza

   

    En el noroeste de Aragón se encuentra la histórica comarca de las Cinco Villas: Sos del Rey Católico, Uncastillo, Sádaba, Ejea de los Caballeros y Tauste, son las cinco villas que dan nombre a la comarca.



   Fue en la Edad Media cuando la historia cincovillesa adquirió notabilidad, forjándose gran parte de la identidad que hoy caracteriza y representa a esta comarca.


    Ocupada por los musulmanes, los reyes pamploneses iniciaron en el siglo X la reconquista de los territorios ocupados, arrebatando a los musulmanes las tierras del norte de Aragón, expulsándolos hacia el sur. En su avanzada y con el fin de asegurar la frontera entre el reino cristiano y el musulmán, los reyes pamploneses, y un siglo después, los monarcas del nuevo reino de Aragón, fueron levantando una frontera defensiva de villas fortificadas y fortalezas, colocadas estratégicamente con el fin de repeler los posibles contraataques musulmanes, a la vez que repoblaban los terrenos conquistados, a los que otorgaban extraordinarios privilegios.



   Por todo ello, encontramos que en las Cinco Villas las iglesias son templos de reconquista edificados sobre una colina, junto a una torre atalaya. Son de estilo románico, el que predominaba, por entonces, en la Europa cristiana.


Sos del Rey Católico



Torre del Homenaje (Sos del Rey Católico)
SOS DEL REY CATÓLICO, lugar de nacimiento de Fernando el Católico, es la villa más septentrional de la comarca.

   Fue conquistada en el siglo X por el reino pamplonés. Su estratégico enclave, sobre una atalaya rocosa, la convierte en una fortaleza natural, aún así fue fortificada en todo su perímetro, en la zona más alta se construyó un castillo del que hoy día solo queda en pie la torre del homenaje.



 Junto a ella, está la Iglesia románica de San Esteban con una hermosa cripta excavada en la roca. En el exterior del recinto amurallado la ermita románica de Santa Lucia. 



Iglesia de San Esteban (Sos del Rey Católico)
   Otros edificios de interés son el Ayuntamiento, la Lonja, el palacio de Sada, donde nació el rey Fernando.














Torre del Homenaje (Uncastillo)


UNCASTILLO, recibe su nombre del imponente castillo-fortaleza que se levanta sobre la peña de Ayllón dominando la villa.


 Este castillo se levantó en el siglo XI por el rey navarro Sancho el Mayor, sobre una fortaleza árabe conquistada un siglo antes,  por el rey pamplonés Sancho Garcés.

Iglesia de Santa María (Uncastillo)



   Alrededor del castillo se construyó una muralla que convirtió a Uncastillo en una fortaleza inexpugnable. Como vestigio de ese castillo se conserva la torre del homenaje.




Portada Iglesia Santa María (Uncastillo)
  En Uncastillo destaca la Iglesia de Santa María, construida en el siglo XII, con una de las portadas más bellas del románico aragonés. La iglesia de Santa María ha sufrido numerosas reformas a lo largo de los siglos, aún así no ha perdido la esencia de su espíritu románico. Destacar, igualmente, la iglesia de San Martín, convertida, hoy día, en Museo de Arte Religioso del Prepirineo.
Iglesia de Sta. María (Uncastillo)







    

Castillo (Sádaba)






Catillo de Sádaba

















Más al sur, se encuentra SÁDABA, con un castillo espectacular. Sobre una colina, dominando la villa se alza el original castillo, es de planta rectangular, con siete soberbias torres comunicadas entre sí por un adarve que recorre todo el perímetro del recinto amurallado.
Iglesia de Santa María (Sádaba)











Reseñar la Iglesia de Santa María, uno de los mejores ejemplos del gótico aragonés.



Iglesia de Santa María de la Corona (Ejea de los Caballeros)




EJEA DE LOS CABALLEROS, situada en el centro de la comarca fue conquistada por Alfonso I de Aragón, el Batallador, a principios del siglo XII.


Iglesia de San Salvador (Ejea de los Caballeros)










 Destaca la iglesia de Santa María de la Corona del siglo XII y la Iglesia de San Salvador que responde a la tipología de iglesia-fortaleza.


Iglesia de Santa María (Tauste)










Torre octogonal, Iglesia de Sta. María (Tauste)
Tauste, es la villa más próxima a Zaragoza y al río Ebro, conquistada, igualmente, por Alfonso I el Batallador, conserva la huella de los mudéjares que la habitaron, y dejaron su impronta en la bella torre octogonal de la iglesia de Santa María.