"Viaja a donde la ilusión te lleve"

BUDAPEST - Hungria





   
   Budapest, capital de Hungría, conocida como "La Perla del Danubio"  es una de las ciudades más hermosas de Europa. Surgida de la unificación de las dos ciudades situadas a ambos márgenes del Danubio,  Buda, la vieja ciudad sobre la colina y Pest, el motor económico y comercial. Tras la unificación Budapest se convirtió en la segunda capital del Imperio astro-húngaro, tras la ciudad de Viena.













   El Danubio separa los dos núcleos de población, Buda y Pest, comunicándose a través de siete magníficos puentes, destacando el de las Cadenas el primer puente que unió a las dos ciudades, así como el puente de Elizabeth y el puente de Margaret.




   Budapest ofrece gran variedad de atractivos y lugares a visitar, lugares llenos de historia, como el Castillo Real de Buda, residencia de los reyes húngaros, construido sobre la cima de una montaña en el siglo XIV, por el rey Béla IV de Hungria, monarca considerado como el segundo fundador del estado Húngaro. El Castillo Real de Buda vivió su momento de mayor esplendor en el siglo XV durante el Renacimiento.

















   La Basílica de San Esteban, el edificio religioso más grande del país. La Basílica lleva el nombre del fundador de la Iglesia de Hungría y primer rey del país, el rey Esteban I de Hungría, del cual se conserva una reliquia en una de las capillas del templo.




   La Ópera de Budapest está considerada como el edificio con mejor acústica del mundo, fue inaugurada por el emperador Francisco José en 1884.

   La Isla Margarita, situada en medio del Danubio era el espacio cinegético de reyes, por ello era conocida como "isla de los conejos". Cambia su nomenclatura, Isla Margarita, en honor de la hija del rey Béla IV de Hungría, Margarita, que ingresó en el convento que su padre mandó construir en la isla. Hoy día la isla Margarita es una zona de ocio y esparcimiento, en ella se encuentra el monumento conmemorativo del Centenario de la  Unificación de la ciudad. La isla Margarita está conectada con Buda y Pest a través del puente homónimo, el puente Margarita.







   El Parlamento, impresionante edificio que entremezcla elementos bizantinos y góticos, construido a orillas del Danubio, se refleja en él realzando aún más su soberbia imagen.









   La Iglesia de Santa María, conocida popularmente como la iglesia de Matías, en honor a su restaurador el rey Matías I de Hungría. La Iglesia de Santa María es uno de los templos más bellos de Hungría, en ella, Francisco José de Austria, fue coronado como rey húngaro.

   Una de las plazas más importantes de Budapest es la Plaza de los Héroes de Budapest, en el centro de la misma se alza el Memorial del Milenio, construido para conmemorar los mil años de la fundación de Hungría. En él se encuentran las estatuas de los líderes de las siete tribus fundadoras así como otras personalidades ilustres del país.

   Otro enclave que recuerda la fundación de Hungría es el Bastión de los Pescadores, hermoso mirador, formado por numerosos paseos, escaleras y terrazas desde el que se puede disfrutar de excepcionales vistas de Budapest, sus siete torres se erigen en honor y memoria de las siete tribus fundadoras, no obstante el nombre rememora y honra la memoria de los pescadores que defendieron este lugar en la Edad Media.






   El Museo de Bellas Artes inaugurado por el emperador Francisco José I de Austria, en él podemos admirar numerosas obras de pintores españoles como Goya, Velázquez, el Greco y Picasso.

   Son famosos en Budapest  los baños termales, de hecho otro apelativo que se le atribuye a la ciudad es el de  "Capital Mundial de las aguas  termales y medicinales". En Budapest hay más de 100 fuentes y pozos con agua entre 21 y 78 grados centígrados.

   Por último, un crucero por el Danubio es otra forma de descubrir la ciudad desde una perspectiva diferente.


Música: Danza Húngara nº 5 - Johannes BRAHMS


PARAJES ASTURIANOS




 Existen recónditos lugares que no, por ser menos conocidos, carecen de belleza e interés. Viajar por la costa occidental asturiana, apartándose de las vías principales, es descubrir parajes increíbles, majestuosos, donde el disfrute de la naturaleza es el principal atractivo y el mar el protagonista principal de una experiencia impresionante.

   Impresionante sin duda son las vistas espectaculares desde el Mirador del Cabo de Busto, escabrosos acantilados cortados por el intrépido Cantábrico, un horizonte interminable, inmenso, donde la vista se recrea y el espíritu se solaza ante tan espectacular panorámica. Mar y cielo, aroma a madreselva y brezo, cormoranes, garzas reales, gaviotas... un paraíso en un rincón de Asturias.

 





























 Numerosas playas salpican las proximidades del Cabo de Busto, escondidas entre los acantilados, de acceso un tanto difícil, pero a las cuales merece la pena llegar, la playa del Cabo, la de Bozo,impresionante por los estratos geológicos de pendiente casi vertical que se observan en ella; la playa Herbosa, la playa de la Cueva.
   












   Esta última, la playa de la Cueva, formada en la desembocadura del río Esva, recóndita, apartada y extraordinaria, es una playa tranquila cuyo silencio sólo es quebrado por las encrespadas olas, aprovechadas por intrépidos surfistas. Su grandiosidad inunda el ánimo de una sensación placentera de serenidad, paz y sosiego.